jueves, 23 de agosto de 2012

Le cuento namber wan

Érase una vez, hace mucho mucho tiempo (ayer por la tarde), en un lugar muy muy lejano (Valdebeba del Pepinillo), Geulfoncio se aburría mucho en su casa, y decidió hacer una carrera de piedras en el suelo de su mansion de 1 mm². Entonces se dio cuenta de que era una mala idea, porque era mucho trabajo coger las piedras silvestres para la carrera. ✈ muahahha. Maldito Monicaco, poniendo chorradas como siempre... Qué avión más bonito :D bueno, en fin... el tío este de Geulfoncio buscó en guguel cómo no aburrirse en casa, y encontró una página llamada Twenty donde adolescentes descerebrados se hacían fotos enfrente del espejo del baño poniendo morritos y luego las ponían en un montaje horroroso del Péint con mÜxaS FÀáltsHhH pRêmOhH. Tras partirse el culo antifonario de risa de ellos, se tiró por la ventana pero como es inmortal no le pasó ná. Una vez en la calle, se dio cuenta de que hacía calor, así que fue a un bar bar a tomarse un chocolate bien calentito. Allí se encontró con Asmensia, su hermana, tan retrasada que era más lista que Geulfoncio, comiéndose una sopa de magma. Geulfoncio sacó su lanzallamas de la espalda y la saludó quemando el local, y entonces no sé cómo seguir se fueron juntos por razones desconocidas a freir churros literalmente, así que les contrataron en una churrería, la cual vendía sus productos como churros. Su dueño, Saladín van Cacas, quien echaba sal en vez de azúcar a los churros (de ahí su maligno y tremendamente disimulado nombre), cerró el negocio por quiebra a los 0'00000000000000000001 picosegundos de contratarlos. Desmoralizados, en realidad no, ya que nunca tuvieron moral alguna se fueron a sus respectivas casas, y tras jugar con sus bulldozers... ¡Monicaco! ¡¿Se escriben así las excavadoras esas?! Emm... no creo que se escriban "¡Uh, uh, ah ah!"... En fin, esto me pasa por contratar monos. Bueno, volviendo a la historia, el neanderthal se acercó a su cueva... Ups, no era esta historia, en fin, Geulfoncio se acercó a su casa (no, no estoy llamando neanderthal a Geulfoncio en realidad sí), decidió que la mejor manera para no aburrirse era jugar a aburrirse.

Fin(al)

PD: Asmensia se suicidó 894579846592746578343 veces porque tenía calor, porque se aburría, porque su sillón no era cómodo, porque le daba la gana, porque le había tocado la lotería, etc.

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